lunes, 28 de enero de 2013

Sólo por un segundo

El otro día tuve una experiencia breve, intensa y reveladora, aterradora tal vez.



Sólo por un segundo jugué a tu juego, a vuestro juego, me puse vuestra máscara, la interioricé, os observé, os copié y os imité. Sólo por un segundo hice lo que hacéis siempre, por un segundo me puse por encima, levanté la barbilla, alcé mi cara con seguridad, me sentí fuerte e importante, me di aires de superioridad pero sin ser repelente, agarré mi bebida con una mano y la otra la llevaba dentro del pantalón, mi cabeza pensaba "hey nena, ¿qué pasa? No disimules, sé que te gusto". Sólo por un segundo observé a mi alrededor y las vi a ellas, estaban bailando o hablando o riendo o emborrachándose, y yo estaba allí arriba mirándolas sin que se dieran cuenta, observando sus caras, sus pechos, sus modelitos ajustados, sus "perfectas" figuras, sus culos, sus piernas, sus tacones de vértigo. Así podía ser uno más, era uno de ellos, uno de esos tipos guays de la zona VIP de las discotecas, y ellos parecían aceptarme como uno más, pero se alejaban de mí, ya no querrían acercarse a una tía que mira y piensa como un tío, no se acercarían a una "desviada", ya no era un objetivo con el que ligar. Era irónico, librarse de los babosos convirtiéndome en uno de ellos, para no ser un objeto sexual de machos insatisfechos emocionales tenía que objetualizarlas a ellas. Sólo por un momento jugué a tu juego y dio asco, me di asco a mi misma, me dio asco saber lo fácil que es entrar en su juego de machos, aún teniendo apariencia femenina se puede ser un macho ibérico, baboso y asqueroso.

¡NUNCA MÁS, NI TE ATREVAS A MIRARME ASÍ, A MIRARNOS ASÍ, NO SOMOS TÚ MALDITO JUGUETE SEXUAL!

¡NUNCA MÁS, NUNCA MÁS ENTRARÉ EN VUESTRO JUEGO, VUESTRO MUNDO DE MACHOS APESTA!

No hay comentarios:

Publicar un comentario