viernes, 15 de mayo de 2015

Cuatro primaveras


Esta foto tengo que agradecérsela a un amigo que tuvo el valor de encaramarse a lo más alto del andamio
Ya hace cuatro años, buf, otra vez el vértigo de las fechas señaladas, sólo sirven para recordarte lo rápido que pasa el tiempo. Hace cuatro primaveras y la emoción me hacía saltar del sofá, todavía era preso de aquella relación amarga, pero todo daba igual en esos días, porque yo me escapaba de sus rejas y volaba hacia la revolución. De esas fechas recuerdo un subidón de adrenalina increíble, ganas de quemarlo todo, a la mierda el sistema, creemos desde cero nuestro propio mundo. Y cada día en la plaza era un triunfo, Sol se convirtió en mi casa, en nuestra casa, en nuestro hogar. La infraestructura crecía rápido: casetas, puestos, tiendas de campaña, toldos... Todo servía. Cada cual se apuntaba al equipo que más afinidad le transmitía, me debatí entre varios y acabé por decidirme por derechos animales. Qué momentos, qué gente tan maravillosa, qué comida, qué potencia. Los momentos difíciles o tristes pasaban volando. La comida era parte de nuestro activismo, aún recuerdo esa madrugada de no parar, ese equipazo vegan power que realizó torrijas veganas para el desayuno de toda la acampada. Pan, leche de soja, harina, aceite, azúcar, pin pan, pin pan, trabajo en cadena, repetitivo pero motivante, energía y buena vibra. Mucha gente se acercaba pidiendo información, fuimos muches quienes nos conocimos allí, algunos lazos siguen firmes, otros se deshicieron con el tiempo. Muches buscaban un empujón definitivo y abrazaron el veganismo como su forma de ser coherente consigo mismes, no querían formar parte de las muertes de animales, desde ese momento ya no más.
Y hubo mucha mierda, claro que sí, lo de la pancarta feminista arrancada por un macho con el aplauso de otres tantes, en fin. Pero tuvo su respuesta y varios balcones de sol amanecieron para combatir el machismo imperante en la acampada, porque si está en la sociedad y nosotres somos parte de ella, el machismo no va a irse tan fácilmente. Y se denunciaron agresiones machistas, y en seguida los mass media a desvirtuarlo todo en contra nuestra, como si fuera de Sol el machismo fuera un peligro extinto.

Ahora o Nunca. Junto a un huerto urbano en medio de Sol.
Y fueron unas semanas muy bonitas, algunes autónomes se quedaban al margen, pues aquello era de refors o eso de mezclarse con gente tan diferente ideológicamente no acabaría en buen puerto, demasiados partidos interesados, decían. Y tenían razón en muchas cosas, pero yo quise estar ahí, esa sensación de estar viviendo un momento histórico, único. Mi instinto me guiaba, en esos días era pura euforia, el corazón iba tan rápido, me costaba dormir, y no sólo por los tambores de la plaza o la gente de fiesta que había alrededor, mis ganas de volar estaban más arriba que nunca. Tenía la energía sexual a tope, y alguien preguntará: “¿Pero follaste? ¿No? Si todo el mundo folló en Sol”. Pues todo el mundo menos yo. Pero, ¿acaso importa? Tener la energía sexual alta suele ser en mí un síntoma de estar muy bien, de estar en mi eje, en mi mundo, en mi centro.
Lo que sentí y viví esos días es difícil de resumir, ese flotar, levitar, andar entre las nubes. Y casi literalmente, subide a un andamio (no demasiado arriba) podía ver a todo el mundo allí reunide, gritando, peleando, luchando. Y un día todo desapareció, y volvimos, pero hubo un momento en el que ya no podíamos volver, tampoco sabíamos si queríamos, y se llevó el trabajo a los barrios, y esto me cabreó en un principio, no podía dejar Sol, como une yonki del azúcar que no deja sus piruletas. Pero floreció, y nada es perfecto, pero se empezó a construir red, los partidos intentaron sacar tajada, siempre lo han hecho, pero no les iba a salir gratis, la cara del politicucho de turno mojado en un deshaucio no tiene precio. ¿Y ahora? ¿Y que pasará dentro de cuatro años? Nadie sabe, nos están apretando más, y las rebeldías no nos salen gratis.

¿Y quién lo empezó? Hay quien dice que fue una conspiración gubernamental para acallar posibles revueltas y reconducir la rabia, otres dicen que fueron les anarquistas, que prendieron la mecha y les demás hicieron la revuelta suya echando gasolina. Sinceramente, no creo que lo sepamos con certeza, pero sabemos como siguió y como sigue hoy.


Nos deseo muchos 15Ms, muchas revueltas, muchas personas lindas que se crucen en nuestros caminos, mucha revolución, mucha lucha cotidiana, muchas relaciones trabajadas desde la horizontalidad y el cariño. Os deseo, y me deseo, que la lucha no acabe nunca, que no dejemos que se apague, que la hagamos nuestra en cada pequeña gran acción de nuestros días.