lunes, 19 de noviembre de 2012

Cristales rotos




Ser sincera, admitir la derrota, agachar la cabeza, volver a levantarla, caerse, arratrarse, levantarse, mirar al frente, mirar bien lejos, mirarte en un espejo y aceptar lo que eres, lo que fuiste, sin saber muy bien qué serás mañana o si seguirás viva. Lo importante es lo que te mueve por dentro, que mierdas sabe nadie de ti, que se jodan, que se pudran en el cielo, el infierno me lo quedo para mí, allí hace calor y el fuego limpia mi conciencia, dispersa los recuerdos turbios del pasado.

Somos fríxs, gélidxs, heladxs, estamos muertxs, sólo importamos nosotrxs, sólo existimos nosotrxs, el mundo puede estinguirse mientras sigamos vivxs; sentimos indiferencia, odio, rencor, avaricia, envidia; hay sangre y vísceras por todas partes, corazones abiertos derramando venganza. Esa venganza alberga nuestro odio, se volverá contra nosotrxs mismxs, nos clavará cirstales rotos en nuestras entrañas, sangraremos sin saber por qué. Nos acostaremos, dormiremos, tendremos pesadillas, gritaremos sin abrir la boca mientras damos vueltas en la cama, y antes de despertar escupiremos sangre después de haber masticado cristales rotos. Caminaremos en la oscuridad, sin rumbo, vagando en una espiral infinita, solas, tristes, sucias, descalzas, caminando sobre cristales rotos. Finalmente nuestro odio se encontrará a sí mismo reflejado en un crsital, un cristal roto, que clavará sus pedazos en nosotrxs, entonces será demasiado tarde, entonces ya no podremos mirar atrás. Nuestros ojos lloran sangre, nuestra garganta está ya rota, nuestras manos inmóviles intentan agarrarse para no dejarnos caer, nuestras piernas ceden, caemos al suelo, pero no hay suelo, nada nos sostiene, ceamos al vacío, caemos una y otra vez, caemos y en el fondo solo hay cristales, cristales rotos; la muerte nos espera allí, la aceptamos, la miramos y sonreimos, sabemos que es el fin, pero ya nada importa, nuestro odio se clavó en nosotrxs, como cristales, como cristales rotos.

sábado, 10 de noviembre de 2012

Si todavía estuviéramos juntas




Si todavía estuvieramos juntas, si siguieramos compartiendo desayuno, comida y cena; si tuvieramos esas conversaciones eternas, esas noches en vela disfrutando de saber que estamos vivas y nos tenemos las unas a las otras; si siguieramos riéndonos juntas, ajenas al resto del universo; si todavía pudiera ver vuestras caras por las mañanas al despertar; si pudiera volver atrás cogería cada segundo para guardarlo y no soltarlo nunca. Pero esto ya no va a suceder jamás, ya no es posible, el mundo da muchas vueltas, pero nuestro mundo ya ha sido exprimido y agotado, ya no hay vuelta atrás, todo acabó. Si siguieramos juntas os contaría tantas cosas: que me enamoro y me desenamoro cada día, cada noche, en cada sueño; que ahora tengo una nueva vida, que salgo mucho por las calles de Madrid, que las conversaciones por la noche sin vosotras ya no son iguales; que me abro paso hacia un futuro laboral duro y precario en los tiempos en los que vivimos; que sigo estudiando idiomas intentando abrir mi mente hacia nuevos horizontes; que tengo muchos planes en la cabeza, que quiero hacer un montón de viajes, que ahora conozco a nuevas personas que van ocupando mi corazón, pero que vuestro espacio en él sigue intacto, que todavía os recuerdo, que vuestra presencia en mi mente me deja un sabor agridulce. Os diría que tengo muchas dudas, muchas preguntas, nuevos caminos se abern delante de mí, todo es raro y nuevo, pero a la vez siento que mi vida es cíclica y que hay experiencias que ya he vivido; os diría que hay días en los que despierto angustiada en la soledad de mi cama gritando y llorando en silencio, y que en otros me sumerjo en el fondo de mis deseos del subconsciente y me dejo llevar, lo siento, lo vivo, sé que estoy soñando, lo controlo, lo dejo fluir hasta que el despertador devuelve mi alma a mi cuerpo, ese cuerpo que me ata y me libera al mismo tiempo. Quiero contaros tantas cosas, pero no estais, estais tan lejos, quisiera compartir tantos momentos buenos, tantas dudas e inseguridades, quisiera saber qué pensais, cómo estais, qué es de vuestras vidas, cómo sentis, saber que seguís vivas y contentas me vale.

Aunque sé que vosotras seguis con vida, estais fuera de la mía, y en estos momentos se me viene a la cabeza la canción de Payo Malo de Debido al Olvido: "El mundo gira aunque sea sin ti, el mundo gira y tú no estás aquí" "Es ley de vida, aunque a veces se me olvida, debido a este olvido tu muerte me causó heridas, busco una razón que impida sentirme triste, ahiora que te fuiste, mi corazón suspira".

Madrugadas de nostalgia gritándole a la nada...